El Real Betis ha recopilado una importante cantidad de material de vídeo y audio que ha enviado a la Real Federación Española de Fútbol, tras la investigación abierta por parte del Comité de Competición de este organismo, acerca de los motivos que provocaron la suspensión del derbi del pasado sábado en el estadio Benito Villamarín.

El club verdiblanco quiere que se esclarezca quién fue el autor del lanzamiento del tubo que impactó en la cabeza de Joan Jordán (ya hay un detenido) y todo lo que sucedió después en la zona de banquillos, donde los jugadores béticos han señalado que Julen Lopetegui instó a que se dejara de jugar el encuentro. Tanto Ángel Haro, presidente del Betis, como su entrenador, Manuel Pellegrini, han sido tajantes a la hora de solicitar que haya transparencia en todo este caso para que se conozca toda la verdad.

Como informa Mateo González en alfinaldelpalmera.com, la ubicación de cámaras de seguridad en la grada de Gol Sur ha facilitado el trabajo de la Policía Nacional a la hora de practicar la detención del individuo que lanzó este tubo, que es utilizado para las banderas de la grada de animación. El club bético ha demostrado que no hubo irregularidades en el control de acceso de esa grada, sino que esas banderas y sus mástiles se encuentran validadas tanto por la Federación como por la Policía para que sean utilizados los días de partido y se guardan habitualmente en una estancia sita en las galerías del Gol Sur.

Con ello defiende el Betis que no se le sancione con un posible cierre del estadio Benito Villamarín o de esa grada en concreto, sino que se persiga al autor y éste cargue con las consecuencias de su delictiva acción. El Betis ya se siente suficientemente perjudicado por haber tenido que desalojar su estadio y jugar al día siguiente con las tribunas vacías.

Además, el Betis tiene varios minutos de grabación desde cámaras ubicadas cerca de la zona de banquillos que ha enviado a la Federación para que este organismo abra una investigación y se conozca qué sucedió exactamente, ya que los futbolistas verdiblancos, presentes en la zona, acusan a Lopetegui de instar a Jordán, hasta siete minutos después del impacto, a que solicitar asistencia médica y así provocar la suspensión del partido ante la deriva que estaba llevando el partido y las bajas con las que contaba el cuadro de Nervión.

La idea es que se trabaje con la mayor transparencia posible para que la Federación analice todo lo sucedido y actúe en consecuencia tras el expediente abierto por la suspensión del partido y la imagen dada al mundo en el derbi sevillano y el perjuicio ocasionado a los aficionados que estaban presentes en las gradas.

Ángel Haro, presidente del Betis, había manifestado que «fue un atentado al fútbol, no ayuda a la imagen de un derbi. El Betis hizo un comunicado categórico en denunciar cualquier tipo de violencia por arrojar objetos al campo y actos que no son fútbol. Somos los principales interesados en que se aclarezca todo lo sucedido. El lanzamiento de un tubo de plástico y todo lo que sucedió para que 45.000 béticos no puedan disfrutar de su equipo haría que sea un tercero el que depure responsabilidades. Pondremos vídeos y todas las pruebas posibles a disposición».

Mientras, Pellegrini afirmó en la misma línea que «el daño al fútbol es tan grande que merece una investigación. No se puede volver a jugar sin público. Esa investigación la harán las persona adecuadas. No quiero dar la razón o no darla; cada uno ofrece su versión. Un tubo de plástico desde esa distancia no sé si puede producir tanto daño, pero hay informes médicos. El daño al fútbol está hecho partiendo del repudio total hacia la persona que lanzó eso desde la grada. No deslizo nada. Me alegro de que esté bien Jordán, en su casa sin problemas. El daño al fútbol es muy grande y hay que investigar».